Blanca Esteban Luna / Seguridad Alimentaria (Asociación de Celíacos y
Sensibles al Gluten)

Cuando un celíaco se va de viaje es muy importante que se prepare un kit sin gluten para posibles imprevistos que le puedan surgir.

Para no viajar excesivamente cargados es conveniente contactar con antelación con la Asociación de Celíacos de la zona a la que vamos, ya que nos podrán informar sobre establecimientos en la zona donde adquirir estos productos y también sobre restaurantes que ofrezcan opciones sin gluten.

Para calcular la cantidad de productos que debemos llevar, hay que tener en cuenta los siguientes factores:
• Destino: No es lo mismo viajar a una ciudad grande, donde siempre encontraremos opciones sin gluten que, a un pueblecito pequeño en una zona de difícil acceso, donde encontrar opciones sin gluten será mucho más difícil. Además, si salimos de España, dependiendo de la normativa del país, los alimentos que nos va a permitir introducir pueden variar, por lo que conviene hablar con antelación con la embajada del país al que nos dirigimos. Además, el idioma puede ser un impedimento para hacernos entender, por lo que si no lo dominamos conviene llevar un texto informativo en el idioma del destino.
• Medio de transporte en el que viajamos: dependiendo si viajamos en avión, tren, autobús o coche, las facilidades que tendremos para llevar productos serán distintas.
• Duración de la estancia: para una estancia corta bastará con preparar un kit muy básico sobre todo para los desayunos, y si la estancia es larga tendremos que organizar un kit más completo.
• Alojamiento: Nuestra planificación variará si tenemos pensado alojarnos en un apartamento y hacer las comidas en casa, si nos alojamos en un hotel y las comidas están incluidas o si nos alojamos en hotel/apartamento, pero tenemos pensado hacer las comidas fuera de casa en restaurantes o tipo picnic en las excursiones que hagamos.
Teniendo en cuenta estos factores, vamos a explicar a continuación los elementos que nos deberíamos llevar para preparar un kit de viaje básico sin gluten:
• Cereales o galletas para el desayuno
• Pan sin gluten
• Tortitas de maíz o arroz sin gluten o algún snack que os guste
• Embutido envasado al vacío que no necesite refrigeración
• Frutos secos al natural y frutas desecadas
• Alguna lata de atún o sardinas al natural o en aceite
• Bolsas de plástico zip y papel de aluminio para envolver nuestra comida
Si la estancia va a ser larga podéis incluir también pasta sin gluten.
De todas formas, puede que os encontréis con imprevistos en el viaje y hay que estar preparados, por ejemplo:
• En los viajes en avión, aunque se haya solicitado con antelación el menú sin gluten, hay veces que este falla y por distintos motivos puede que finalmente no llegue al avión, por lo que conviene llevarse algún bocadillo o sándwich sin gluten, ya que suelen ser viajes largos.
• Puede que en el hotel en el que nos alojamos nos confirmaran al hacer la reserva que tendrían opciones sin gluten, sin embargo, al llegar al primer desayuno nos comentan que se les han acabado, por lo que siempre conviene llevar algo para los primeros días y para los siguientes podemos comprarlo. Si encontrar productos sin gluten en la zona es difícil, en los desayunos de los hoteles siempre encontraremos leche, huevos, fruta, etc.
• Por otro lado, puede que en la zona donde viajas haya pocas opciones sin gluten, pero en cualquier lugar del mundo encontrarás fruta fresca, y en los supermercados a lo mejor no encontrarás productos especiales sin gluten, pero sí arroz, leche, verduras, carne, pescados huevos, etc., por lo que, aunque te quedes sin provisiones sin gluten no tienes por qué pasar hambre.