“Hablando con” es un espacio creado por Oportunidades y Estrategias para compartir con protagonistas especiales de nuestra vida profesional ideas, momentos y filosofías, para generar opinión respecto de las habilidades que mejoran el desempeño de las personas en el entorno laboral. En esta ocasión hablamos con Jorge Rojas, un estudiante al que le apasiona el fútbol que nos hablará de los valores del respeto, la disciplina, el sacrificio y el trabajo en equipo.

Pregunta.- Con tan solo 16 años me consta que tienes la mentalidad de un adulto, ¿cómo se lleva a tu edad tener esa mentalidad, estando fuera un poco de lo típico de los 16 años?
Respuesta.-
Si es cierto como tú comentas que me considero un poco adulto porque siempre desde pequeño en mi casa mis padres me han inculcado unos valores, tanto a mi hermano como a mí. Esos valores de respeto, de disciplina, de trabajo, de sacrificio… que he llevado a cabo durante mi vida y que también llevo al fútbol porque juego desde los 6 años. La Escuela de Fútbol de Miguelturra también me ha aportado esos valores de respeto al compañero, de humildad y de trabajo en equipo.


P.- ¿Es tan importante en la vida desarrollar esos valores?
R.-
Para mí sin valores creo que no se llega a ninguna parte.


P.- Lees habitualmente, ¿cuáles han sido los tres últimos libros que has leído?
R.-
Tu libro “Historias de un mentor”, luego también del autor José Montañez su último libro que se titula “¿A qué putas esperas?”, y otro que se llama “¿Quién se ha llevado mi queso?”, que es una metáfora que te abre mucho la realidad.


P.- ¿Qué te ha enseñado “¿Quién me ha llevado mi queso?”?
R.-
En la vida va haber siempre circunstancias en las que nos vamos a tener que enfrentar a ciertas adversidades que uno no quiere, y si no te enfrentas a esa adversidad te vas a quedar en tu zona de confort, pero si quieres salir de ahí tienes que salir fuera, visitar y explorar el mundo.


P.- Y el libro “¿A qué putas esperas?”, ¿qué te ha enseñado?
R.-
Como he comentado, es del autor José Montañez y son tres libros. El primero se llama “Espabila de una puta vez”, luego el siguiente se llama “La vida son dos putos días”, y el tercero “¿A qué putas esperas?”. Y entonces, te hace ver la realidad y abrir los ojos de que la vida como dice son dos días y si un día ya ha pasado, pues vamos a disfrutar y aprovechar cada instante como si fuera el ultimo, a ser feliz y a darlo todo en cada instante.


P.- Y, por último, ¿qué te ha enseñado mi libro “Historias de un mentor”?
R.-
La verdad que mucho, porque Raúl, que es chico con el viajas durante un par de años, me he visto identificado en algunas de sus situaciones debido a que cada Gmail que le enviabas y muchos de ellos no te los leía o tardaba en hacerlo, eso me ha pasado a mí en un pasado, de que tardaba tanto en los estudios o en cualquier ámbito de la vida y lo dejas pasar, y si es cierto que cada cosa es importante en la vida.


P.- ¿Se puede estudiar, jugar al fútbol, leer, divertirse…?
R.-
Por supuesto, hay tiempo para todo. Como he comentado antes, mis padres me han inculcado esa disciplina, esa organización, y cada día me lo organizo muy bien y puedo hacer cada una de esas cosas.


P.- ¿Qué te está enseñando el fútbol?
R.-
Primero de todo quería dar las gracias porque soy un afortunado. Los entrenadores y la directiva de la Escuela de Fútbol Base de Miguelturra, que subió la temporada pasada a División de Honor, la máxima categoría de juvenil, han contado conmigo para poder estar en su equipo. Creo que es un regalo muy bueno que estoy intentando aprovechar al máximo y lo que me está enseñado, sobre todo estos últimos años, es que de la derrota se aprende mucho, es como si fuese una victoria porque para el futuro te enseña mucho.


P.- ¿Cómo afronta un chaval joven como tú un momento complicado en un partido de fútbol?
R.-
A lo largo de un partido de fútbol puedes cometer un error individual, o te pueden encajar un gol, o el árbitro puede fallar en una decisión… pero es en esos momentos cuando tu cabeza decide afrontarlo positivamente o negativamente. Si lo afrontas negativamente, tu cabeza, que es lo que controla tu cuerpo, a la hora de afrontar la siguiente jugada no te va a salir bien, pero si estas positivo lo intentas con más energía y más ganas.


P.- ¿Qué te aporta el fútbol y la vida para el trabajo en equipo?
R.-
Es fundamental, a mí me gusta mucho trabajar en equipo ya sea en el fútbol o en el instituto en cualquier trabajo. Si trabajas con un compañero puedes llegar mucho más lejos que si lo haces tu solo.


P.- ¿Y en la comunicación?
R.-
También, es un pilar fundamental. Si no te comunicas en el terreno de juego es muy complicado, por ejemplo, poder avisar a tu compañero cuando le das un pase de que te viene un rival, y en la vida pasaría lo mismo.


P.- ¿Y en cuanto a la resiliencia?
R.-
Igual, sobre todo este año que es cuando más lo estamos viviendo, entonces, es ahí donde se ve si eres fuerte o no, porque las derrotas este año las estamos experimentado mucho, pero de cara al futuro nos van a enseñar.


P.- ¿La humildad?
R.-
Yo la llevo muy de cara porque si no tienes los pies en la tierra y se te sube el ego no eres nadie.


P.- Háblame del respeto, ¿a que respetas en el mundo del fútbol para trasladarlo a la vida?
R.-
A todo, ya sea el respeto a los rivales, a los compañeros, a las alineaciones de los entrenadores si estas o si no estas, al material, a los árbitros… a todo lo que nos rodea.


P.- ¿Cómo encajas este futuro que te va a acontecer? ¿Estas preparado?
R.-
Estoy preparado, aunque el éxito, sobre todo futbolístico es muy difícil de alcanzar ya que llegan muy pocos. Pero sí que tengo claro que lo voy a intentar y voy a dar lo máximo de mí, y si no sucede ese éxito futbolístico, intentaré dar lo máximo de mí en otro ámbito de la vida.


P.- ¿Y si no eres futbolista?
R.-
Estoy estudiando bachillerato y lo estoy asociando a algo que tenga que ver con el deporte. Me gusta también el coaching, el desarrollo personal y también, al conocerte a ti, el mundo empresarial. Me gusta ayudar a la gente.