Toda una vida juntos entre ricas tapas y cafés

Mariano López y Luis Martínez llevan toda la vida juntos, más que con sus familias si se me apura. Se conocen desde niños, en El Alcornocal, una aldea de Piedrabuena. La buena sintonía entre ambos hizo que al llegar a Ciudad Real decidieran montar un bar, que bautizaron como La Unión (por aquello de la mítica y entonces de moda banda de pop español). Lo inauguraron en noviembre de 1989, hace algo más de treinta años, en el número 7 de la Avenida de la Mancha de Ciudad Real, y ahí siguen incansables y unidos. Una larga trayectoria que les avala como uno de los pocos bares abiertos en Ciudad Real durante tanto tiempo y en las mismas manos.

El trajín en La Unión se concentra principalmente por el día, con el café matutino, generosos montados y bocadillos y el rico tapeo de mediodía. Luis atiende en barra mientras que Mariano se ocupa de la cocina. Su especialidad es la tortilla de patatas con cebolla, pero la parroquia tampoco hace ascos a una buena tapa de forro de cerdo, salchichas, patatas fritas con ajo y perejil y muchas tapas más de guisos y platos caseros. Sus clientes son amigos, muchos son del barrio y se conocen desde que abrieron, aunque también vienen de otros sitios incluso de los municipios de alrededor. Cerca está también el polideportivo y comedor del colegio salesiano Hermano Gárate, por lo que algunos profesores son habituales de La Unión, sobre todo los viernes a mediodía.

Todos ellos, clientes y amigos, pueden disfrutar de bocadillos, calientes y fríos, de beicon, lomo, panceta, tortilla, salchichas, jamón, queso, anchoas, atún… a 3,50 euros, y a 2 euros unos “crecidos” montados. Ya saben, si pasan por la Avenida de la Mancha, no duden en detenerse a tomar un rico pincho o bocadillo de tortilla en La Unión. Su cuerpo se lo agradecerá.

Abren a las 7 de la mañana y cierran a las once y media de la noche “en sesión continua como los cines”, subraya Luis, de lunes a sábado. Los domingos están cerrados y también algunos festivos señalados como en Navidad o Semana Santa.