Deva, una hembra de hispano bretón de 4 años, obtuvo el galardón de Perro de San Roque 2015, aunque hubo otros tantos más ganadores de las curiosas categorías del tradicional concurso que abre las fiestas del barrio San Roque-La Hoya. Este año se desarrolló una exhibición de obediencia y simulación de defensa por parte del can en caso de ataque a su dueño.

Elección del perro de San RoqueEl comienzo de las fiestas en honor a San Roque quedaron oficialmente inauguradas en la tarde del viernes con el tradicional concurso canino “El perro de San Roque” que, fiel a la tradición, concentra a vecinos y a multitud de participantes con sus mascotas. Durante algo más de media hora, un total de 33 personas inscribieron a sus canes al evento, donde además de conseguir un dorsal con el número identificativo, recibieron un vale de una tienda de animales daimileña a canjear por pienso. En las inmediaciones del escenario, donde posteriormente desfilarían, se acondicionaron de recipientes para que los perros pudieran refrescarse en la calurosa tarde de verano.
Justo antes de comenzar con el concurso, Natividad Rodríguez, encargada de las presentaciones y ligada al colectivo asociativo en apoyo a los animales, dio a conocer al jurado que estaría formado por un adiestrador especializado en pastor alemán y otras razas grandes, el gestor de la futura residencia canina que abrirá sus puertas en Daimiel y el propietario de una peluquería canina y especializado en razas pequeñas. También, entró en las valoraciones otro adiestrador andaluz que además de formar parte del jurado, fue el encargado de una exhibición de obediencia y simulación de defensa con Kiru, su pastor alemán de línea checa.
El concurso constó de dos vueltas al ring, situado junto al escenario, una comprobación por parte del jurado de que los perros se encontraban en buenas condiciones físicas y no eran perros agresivos, y, finalmente, visualización del can. Las categorías se diferenciaron por edad, por mezcla de raza, además de los característicos premios por el más pequeño o el más exótico. Entre los participantes se pudo ver una gran variedad, como alaskan malamute, husky, mini pincher, bulldog francés, galgo, chihuahua, y otros tantos mestizos.
En la categoría de cachorros: Lobo, un simpático Husky Siberiano resultó ganador; en la clase jóvenes, la victoria se la llevó Airón, un bóxer; en clase abierta, la galardonada fue Golfa, una hembra de Basset Hound; la más coqueta fue Manchita; el más exótico Tyson; la más joven, Nala de tan solo dos meses; el más viejo fue Blanqui, con 15 años; el más pequeño el chihuahua Pitu; la más grande, la galga pandora; el más parecido a su dueño fue Gordi; el más chucho fue Chico; el más dócil fue la hembra Moon. Finalmente, el premio al Perro de San Roque se lo llevo Deva, una hembra de hispano bretón de 4 años.
Una tarde entretenida, en la cual no faltó el cariño entre dueños y perros, y la buena acogida de los vecinos que afirman estar encantados con estas iniciativas, ya que “dan vida y alegría a los barrios, y a sus vecinos”.