El buen gusto por lo exquisito

Con P de Poder, de querer es poder; de Pasado entrañable y de Presente  ilusionante, la Cervecería-Vinoteca La Pajarería echa a volar en el gremio de la hostelería tras 30 años siendo Plancton, la tienda de animales de referencia de la capital. Una reconversión radical en la que  Inmaculada Navarro Ortiz y Luis Fernando Caballero Klink han puesto todo su empeño y muchas horas de trabajo. Y lo han conseguido desde el 21 de julio que inauguraron, dando más vida a este bulevar, integrando el pasaje San Isidro en un establecimiento moderno pero cálido y familiar a la vez, con las puertas abiertas de par en par y con una fresca terraza, rescatando la solera de la taberna de siempre. La simbología a lo que fue también está presente en toda la decoración y diseño del local, realizado por Miguel Alberdi, con muebles antiguos restaurados por ellos mismos y objetos cerámicos de Ángeles Navarro.

En horario de 9 de la mañana a 4 de la tarde y de 7:30 a cierre, La Pajarería ofrece desayunos, aperitivos y tapeo de mañana, mediodía, tarde y noche, con tapas y raciones frías de productos seleccionados: buen jamón, ricas anchoas del Cantábrico, de los mejores quesos, mejillones, etc., a un precio excelente. Para beber cuentan con cervezas Mahou, en toda su línea, y escogidos vinos de todas las Denominaciones de Origen españolas, una vinoteca que los más entendidos valoran por su calidad y originalidad.

En septiembre, La Pajarería, atendida por cinco personas, piensa incorporar ensaladas y tostas para acompañamiento a las tapas gourmet e incluso barajan otras apuestas en coctelería y algo más. La Pajarería tiene un aforo de 55 personas en el interior más otras 30 en terraza, con varios espacios para tapear de pie o sentado en calma y con buen servicio.