En una privilegiada esquina de la capital, en la plazoleta junto al Palacio Provincial de la Diputación y a la iglesia y al pasaje de la Merced, existe un cafetín con una soleada terraza que día a día va ganando adeptos en la ciudad. La constancia, el cariño y las grandes dosis de trabajo de sus responsables, Maxi García-Motos y Carlos Álvaro, han hecho que el café-bar Musicaula sea hoy cita obligada de funcionarios de la Diputación, de Correos, del Ayuntamiento…, además de comerciantes de la zona sin olvidar el cliente de paso y el turista.

Comenzaron en 2014 con esta aventura y, desde entonces, han sabido dar en el clavo de los gustos y preferencias de la gente, como esa tortilla de patatas que acompaña de tapa al café de la mañana, a 1,30 euros todo, (ya se ha convertido en la estrella del local); ese montado con pan recién hecho que se deshace en la boca, o esas gambas rebozadas de verdad, que tanto agradece el comensal que disfruta de las raciones de Musicaula. Su terraza es la joya de la corona, 15 mesas donde es difícil encontrar un hueco, ya que la clientela prefiere exteriores sí o sí. De ahí que de momento mantendrán el número de mesas, reduciéndolas a 8 cuando el frío se eche encima. De todos modos, sus cuatro estufas y unas mamparas de metacrilato amortiguan posibles adversidades meteorológicas.

Desde las ocho y cuarto de la mañana, el café-bar Musicaula abre sus puertas de lunes a sábado, hasta el cierre a medianoche. Los domingos, descanso del personal. No ofrecen comidas ni menús, por lo que de 3 a 5 cierran temporalmente. Para los desayunos, sirven café o sus más de 14 variedades de tés, con una tapa de tortilla de patatas, jamón, chorizo, atún… Para el tapeo del día o la noche, una fresquísima cerveza a 2,20 euros o buenos vinos de la tierra, con un surtido variadísimo de raciones: carrillada, magro con tomate, calamares, chipirones…, además de montados y bocadillos (para consumir en el local o para llevar) de lomo, jamón, calamares, beicon, tortillas al gusto…

Musicaula celebra también, por encargo, fiestas de cumpleaños o cenas familiares. Es conveniente reservar para cenar, sobre todo viernes y sábados. En plantilla, cinco personas, tres a tiempo completo y dos de forma parcial, que están siempre atentos a lo que necesita el cliente. Si pasas por la plaza del nazareno, siéntate un rato y disfruta de un rico tentempié al sol en Musicaula.